La llegada de Vasilije Micic a la NBA ha sido un viaje lleno de desafíos y expectativas frustradas. Considerado uno de los mejores extremos del baloncesto europeo, el serbio se unió al Oklahoma City Thunder en 2023 en un intento por mostrar su talento en la liga más competitiva del mundo. Sin embargo, su experiencia fue complicada desde el principio.
Primeros pasos en Oklahoma
Micic se unió a un equipo bien estructurado, con roles definidos y poco margen de crecimiento dentro de la rotación. Esta situación, unida a la difícil adaptación física que exige la NBA, llevó a los Thunder a traspasarlo a los Charlotte Hornets al cabo de unos meses.
Breve descanso en Charlotte
Con los Hornets, Micic tuvo la oportunidad de brillar al final de la temporada pasada, lo que generó esperanzas de que finalmente hubiera encontrado su lugar en la liga. Sin embargo, el inicio de la nueva temporada fue decepcionante. Aunque comenzó con minutos limitados en los primeros juegos, su tiempo en el campo disminuyó drásticamente y no jugó en los últimos cuatro juegos del equipo.
Rendimiento del equipo
Las actuaciones de los Hornets fueron inconsistentes, con un récord de dos victorias y cinco derrotas en sus primeros siete juegos, lo que los ubicó en el duodécimo lugar de la Conferencia Este. La ausencia de Micic del equipo fue claramente visible, especialmente durante las derrotas consecutivas tras la primera victoria.
Votos de vuelta a Europa
Recientemente ha surgido información sobre el descontento de Micic con su situación actual. Según ‘Backdoor Podcast Basketball’, tanto el Barcelona como el Real Madrid están siguiendo la situación, buscando refuerzos en el perímetro. Sin embargo, las realidades financieras son un factor importante a considerar, ya que Micic tiene un contrato bruto garantizado de 7,7 millones de dólares para esta temporada.
Incertidumbre futura
El año que viene, Micic recibirá una “Team Option” de más de ocho millones de dólares. Dada su actual falta de minutos, es poco probable que alguna franquicia decida ejercer esa opción. Esto plantea la posibilidad de un regreso a Europa, similar al caso de Sasha Vezenkov, quien dejó su contrato con los Sacramento Kings para firmar con el Olympiacos por un contrato más lucrativo en el baloncesto europeo.
El futuro de Vasilije Micic es incierto. La situación económica de clubes como Barça y Real Madrid, que atraviesan periodos de austeridad, complica la posibilidad de que puedan ofrecer un contrato equivalente al que podría conseguir Micic en Europa. La próxima temporada será crucial para determinar el rumbo de su carrera, ya sea que continúe en la NBA o regrese al baloncesto europeo, donde su talento puede volver a brillar.