La equidad en salud es un objetivo central de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas y es esencial para lograr la justicia social y los derechos humanos. La pandemia de COVID-19 ha creado desafíos sin precedentes en todos los ámbitos de la vida, incluido el trabajo. Reveló cómo la desigualdad estructural ha aumentado en la región de las Américas, afectando severamente a la fuerza laboral, especialmente a los más vulnerables, como resultado de la crisis económica, social y sanitaria.
La falta de datos confiables ha eclipsado el alcance de estas desigualdades en salud. Sin embargo, informes como los de la Red de Condiciones de Trabajo EMCONET de la Comisión de Determinantes Sociales de la Salud han promovido esfuerzos nacionales y subregionales para documentar y comprender estas desigualdades en el empleo y el trabajo en América Latina y el Caribe. En 2018, la OPS se sumó a este esfuerzo y estimó las disparidades en salud entre la población activa utilizando la metodología de la OMS. Con el apoyo de la Universidad de Houston y el Centro de Investigación en Salud Ocupacional (CiSAL) de la Universidad Pompeu Fabra, este estudio se amplió para comparar las desigualdades en salud entre 15 países de la región.
Estos hallazgos avanzan en el seguimiento de las desigualdades en salud en el lugar de trabajo y proporcionan una base para nuevas investigaciones, en particular sobre el impacto de la COVID-19. La pandemia ha exacerbado estas desigualdades y empeorado las condiciones de vida y de trabajo. La falta de registro de ocupaciones en los casos de COVID dificulta evaluar el impacto, aunque se sabe que esto ha afectado principalmente a los trabajadores informales, que representan más del 50% de la fuerza laboral de la región.
La pandemia ha cambiado las condiciones laborales, desde el riesgo de infección en el lugar de trabajo hasta la vulnerabilidad de los empleos precarios y los efectos de las medidas de mitigación. Estos cambios han traído nuevos riesgos para la seguridad y salud en el trabajo, incluido el desempleo y la introducción del teletrabajo, que sólo es factible para el 25% de la población activa. También ha habido nuevos riesgos que afectan la salud física y mental de los trabajadores y sus familias.
Para comprender esta realidad, se contará con testimonios de representantes de organizaciones de trabajadores y expertos que enfrentarán los desafíos post-COVID.
Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo 2021
El Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, establecido por la OIT, conmemora a los trabajadores afectados por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales y celebra los logros en materia de prevención. Este año, la OPS se suma a la celebración destacando las desigualdades en la salud de los trabajadores y buscando caminos hacia la equidad sanitaria en el lugar de trabajo, especialmente para los más vulnerables. La pandemia ha exacerbado estas desigualdades. Por lo tanto, se explorarán diferentes perspectivas para mejorar la salud y el bienestar de la fuerza laboral de la región.